Una forma de dar carácter y personalidad a tu hogar es sin duda amueblar algunas habitaciones con bonitas alfombras. No importa si tu gusto es clásico, moderno, minimalista o de cualquier otro estilo, porque todos los diseñadores de interiores coinciden en que las alfombras son la mejor forma de hacer que una habitación sea cálida y acogedora.
La elección del tamaño, la tela, el modelo y el color puede cambiar totalmente el aspecto de la habitación que ha decidido amueblar con la alfombra, así que deje volar su imaginación, ¡pero tenga cuidado de no cometer errores graves!
A continuación, he recopilado algunos consejos prácticos para ayudarte a elegir las alfombras perfectas para tu hogar.
En primer lugar, tienes que hacerte una pregunta sencilla para entender el rumbo a seguir y estar seguro de tu elección: para tus hábitos, tu rutina y tu forma de vivir en casa, tener una alfombra es la elección correcta o se convertiría en un obstaculo. ? Por mucho que una alfombra pueda enriquecer tu hogar, si por ejemplo tienes animales que sueltan pelo, debes tener en cuenta que estos muebles retienen el polvo y el pelo por lo que necesitan una limpieza casi diaria.
Analicemos ahora 5 aspectos fundamentales.
proporciones y posiciones
Yo personalmente no lo llamaría el punto uno, sino el verdadero pilar de la elección de una alfombra. Muchas veces nos dejamos llevar por imágenes o por el deseo de tener ese tipo de alfombra en concreto que hemos visto sin considerar que luego habrá que adaptarla a nuestra realidad. Las proporciones son fundamentales para no descontextualizar este objeto, pero sobre todo para pensar dónde colocarlo. La alfombra no es un simple jarrón de flores que podemos, sea como sea, mover en el espacio con una nueva ubicación.

Tamaño
Otro punto fundamental en la elección de la alfombra es considerar las dimensiones adecuadas; nunca confíes «en el ojo», siempre toma las dimensiones correctas de los espacios que tienes disponibles. La alfombra es uno de esos muebles que debe adaptarse a la perfección a los espacios, no puede ser ni demasiado grande ni demasiado pequeña.
Cada habitación tiene su propia alfombra.
Ya sea por la forma, por el estilo o por el tejido, cada alfombra puede ser más adecuada para una estancia u otra. Por ejemplo, la alfombra para una cocina será más adecuada para tenerla en un tejido fácilmente lavable o plastificado, para que no absorba alimentos y bebidas. O bien, una alfombra de la sala de estar, frente a una cálida chimenea, podría ser agradable un poco más gruesa y con una tela de pelo largo.

Color
Si no quieres atreverte demasiado, los tonos neutros son sin duda los que mejor se adaptan a cada tipo de estilo, pero ojo con los colores claros, tienden a ensuciarse con mucha facilidad. Si tienes niños o mascotas, por el contrario, será mejor que apuestes por colores oscuros que disimulan mejor los signos de la edad. Si por el contrario quieres darle un toque atrevido a tu hogar, apuesta por los colores vivos y las tonalidades luminosas, sí a los estampados y motivos geométricos.

Estilo
En primer lugar, un consejo que te puedo dar es que pienses primero en la alfombra y luego en el resto. Es más fácil elegir el papel pintado o los complementos una vez elegida la moqueta que al revés. En cuanto al estilo, una de las reglas básicas a seguir es que si tienes un mueble muy básico, puedes optar por estampados coloridos y llamativos; por el contrario, si ya tienes una habitación colorida, con papeles pintados llamativos y muebles coloridos, será mejor que elijas una alfombra de color liso con colores suaves. Si te gustan las formas geométricas, puedes pensar en combinarlas con cojines y cortinas.
Ahora que conoces todos los secretos para elegir la mejor de tus alfombras, diviértete decorando tu hogar con estilo y recuerda seguir todos mis consejos para un hogar perfecto!