31 julio 2015 Muebles para el hogar, Diseño de interiores
Un estudio puede representar una solución práctica y económica para una persona que vive sola, pero hay que saber aprovechar los espacios para crear un ambiente, aunque sea pequeño, cómodo, confortable y acogedor. Por eso hemos decidido escribir este artículo para poder darte algunos consejos útiles sobre cómo amueblar un estudio.
Cómo amueblar un estudio: optimizar el espacio
Cuando el espacio es escaso, tienes que abrirte camino, y esto no es necesariamente algo malo. Si bien en todo departamento los espacios deben ser cuidadosamente estudiados y organizados de la mejor manera posible, esta regla se convierte en ley para amueblar un estudio.
Para hacerlo de la mejor manera posible, un consejo que podemos darte es que organices las pocas decenas de metros cuadrados que tienes a tu disposición según sus funciones y tus necesidades. Por eso, una cama, una cocina americana y un rincón donde poder recibir a unos amigos o poder leer serán indispensables. Puedes optimizar el espacio eligiendo un sofá cama con cajones para guardar zapatos u objetos, o por ejemplo, si necesitas un escritorio, una cama alta bajo la que colocar una mesa o escritorio, o un sofá si es necesario.
Aprovecha todos los nichos del estudio y haz separadores con las librerías.
Cómo amueblar un estudio: no te olvides de los espacios verticales
Cuando las superficies son estrechas hay que desplazar la mirada hacia arriba. Esto significa aprovechar las paredes y los espacios verticales a través de estantes que pueden albergar libros, objetos, frascos de cosméticos en el baño, especias y frascos en la cocina. Si el techo es lo suficientemente alto, puedes crear armarios tipo loft para guardar ropa fuera de temporada u otros objetos, aprovechando así un espacio preciado sin impactos visuales demasiado pesados.
Cómo amueblar un estudio: la percepción lo es todo
En un estudio hay pequeños trucos que sugerir para engañar a la vista y la percepción. En primer lugar, los colores que elijas para tu monoambiente deben ser claros. Los tonos pastel o los tonos blancos tienen la ventaja de reflejar la luz y hacer que las habitaciones parezcan más espaciosas. De hecho, los colores demasiado brillantes u oscuros tendrían la contraindicación de hacer que el ambiente parezca estrecho e incluso más pequeño de lo que realmente es.
Otro medio poderoso que puedes usar para engañar a la vista es usar numerosos espejos que tienen la capacidad de aumentar la percepción de los espacios.
Cómo amueblar un estudio: menos es más
A la hora de amueblar un espacio pequeño se debe privilegiar la esencialidad. Por lo tanto, se prohíben las baratijas, las chucherías inútiles, los muebles no funcionales y los muebles de tamaño king.
Un espacio repleto de objetos parecería aún más pequeño, mientras que una mesa o cama demasiado grande y desproporcionada con el resto del espacio crearía un efecto claustrofóbico.
Por último, algunos objetos facilitan la limpieza del entorno. ¡Recordemos que el desorden es el primer enemigo de un espacio confinado, ya que lo hace parecer aún más pequeño!